¡Qué bien que me lo he pasado estas Navidades! Hemos hecho un montón de cosas, y he debido de ser tan bueno que he tenido un montón de regalos.
El día de Nochebuena, como todos los años, tuvimos supercena en casa. Cuando terminamos de cenar llamaron a la puerta y yo fui corriendo a abrir. ¿a qué no sabeis quién era? Pues sí, ¡Papá Noel!
Entró a casa a darnos un montón de regalos, aunque me explicó que no había podido conseguir la cabeza de la Forana, pero que el próximo año lo intentaría otra vez.
Me trajo un montón de bolas para hacer una piscina, los cuentos de los cabezudos, un ordenador, la oca de la Pepa Pig y un banco de herramientas.
El día 28 fuimos a ver el concierto de los Cantajuegos, que a mí me encantó.
Y el día de Nochevieja otra vez superfiesta en casa. Mientras papá hacía la cena, yo estuve dibujando con mamá. ¿A que no sabeís quién es este?
¡Pues el tío Javi!
Un día que fuimos a Grancasa estaban los Reyes Magos. Inés y yo fuimos a darles un beso y pedirles nuestros regalos.
Claro, y luego tuvimos que escribir la carta.
Y ya la víspera de Reyes, por la mañana fuimos a ver el Belén de la Plaza del Pilar. ¡Menudo frío que hacía!
Por la tarde fuimos a ver la cabalgata. ¡cómo me gustó todo! Sobretodo el camión de bomberos.
Y después de cenar tuvimos que prepara las cosas para dejarles a los Reyes. Este año yo quise dejarles croquetas.
Y cuando me levanté por la mañana, ¡Había un montón de regalos!
En casa me trajeron un futbolín y un Hamster. Bueno, y un poquito de carbón de caramelo por el colacao de la mañana.
Luego fuimos a recoger más regalos a casa de los yayos: una Tortuga Ninja, un camión de bomberos, un pinball y un garaje.
¡Me han gustado un montón todos! ¡Es que he debido de ser más bueno!
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